Un niño muere de cáncer cada tres minutos en el mundo. Pese a que más
del 70% de los cánceres infantiles se curan con los tratamientos
actuales, las tasas varían dependiendo del tipo de cáncer y de factores
tales como el estado de la infraestructura del sistema sanitario del
país, la cultura médica y las condiciones socioeconómicas. Por ello, la
Organización Internacional de Padres de Niños con Cáncer, fundada en
España en 1994, alza esta semana la voz para pedir mejor acceso a la
atención para niños y adolescentes con cáncer en todo el mundo. En
España, la tasa de supervivencia es del 76%, y hay 1.500 nuevos casos al
año en niños y adolescentes. De los años ochenta (cuando empezó el
movimiento asociativo de padres) a la actualidad, ha habido una mejora
en la calidad de vida de los menores que padecen cáncer y sus familias.
Pero queda mucho por hacer, sobre todo en investigación y en detección
temprana.
Aunque ha habido un progreso significativo en el desarrollo de fármacos y en tratamientos en los cánceres clave de adultos, el desarrollo de fármacos contra el cáncer infantil ha ido quedándose atrás. El último medicamento para el cáncer infantil desarrollado en Estados Unidos fue hace 30 años. Es por eso por lo que debemos tomar conciencia de la enfermedad, y de la particularidad de que afecte a nuestros pequeños. Por desgracia, no podemos evitar que el cáncer azote nuestros hogares, pero sí podemos trabajar para que la detección de la enfermedad sea más pronta, de manera que se pueda tratar a tiempo y conseguir mejores resultados. Desde la Federación Española de Padres de Niños con Cáncer, luchamos para mejorar la calidad de vida de los menores y sus familias, apoyándoles tanto desde el punto de vista sociosanitario como asistencial, pero necesitamos el apoyo de todos para lograr que no haya ni un niño más con cáncer.— Pilar Ortega, presidenta de la Federación Española de Padres de Niños con Cáncer.
Aunque ha habido un progreso significativo en el desarrollo de fármacos y en tratamientos en los cánceres clave de adultos, el desarrollo de fármacos contra el cáncer infantil ha ido quedándose atrás. El último medicamento para el cáncer infantil desarrollado en Estados Unidos fue hace 30 años. Es por eso por lo que debemos tomar conciencia de la enfermedad, y de la particularidad de que afecte a nuestros pequeños. Por desgracia, no podemos evitar que el cáncer azote nuestros hogares, pero sí podemos trabajar para que la detección de la enfermedad sea más pronta, de manera que se pueda tratar a tiempo y conseguir mejores resultados. Desde la Federación Española de Padres de Niños con Cáncer, luchamos para mejorar la calidad de vida de los menores y sus familias, apoyándoles tanto desde el punto de vista sociosanitario como asistencial, pero necesitamos el apoyo de todos para lograr que no haya ni un niño más con cáncer.— Pilar Ortega, presidenta de la Federación Española de Padres de Niños con Cáncer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario